Quintana Roo es el estado que mejor ha manejado y explotado su belleza y atractivos para atraer turistas de todo el mundo. Con 1,857,000 habitantes un incremento de 3.5 anual, la tasa de crecimiento de Cancún es de 7.9 y Tulum 5.3 la más alta del país, tiene una edad media de 28 años y su población se divide en 50.4% hombres y 45.6% mujeres, son 39,586 extranjeros que viven permanentemente en su territorio.
Recibe anualmente más de un millón de turistas al año, visitantes de todo tipo; gente que busca sus playas, sus ruinas arqueológicas, su vida marina, etc… recientemente se ha vuelto destino favorito de jóvenes que viajan a divertirse y pasarla bien en lo que era un ambiente seguro y que les permitía acceder a tomar alcohol sin las limitaciones de edad en sus países, la droga que se puede obtener fácilmente complementa la oferta de atractivos para ellos.
Esto lo hace muy atractivo para carteles y organizaciones criminales que buscan aprovecharse del constante flujo de turistas y de toda la industria que hay alrededor de ellos.
Lavado de dinero, tráfico de armas, prostitución, venta de drogas, extorción, son sólo algunos de los muy lucrativos negocios para estas organizaciones.
La pelea es por el control de los 130 km de playa que abarca de Cancún a Tulum el año pasado causo 546 homicidios dolosos acorde con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
El cartel de Sinaloa, el cartel del Golfo ( Los Pelones) y Cartel Jalisco Nueva Generación pelean un botín calculado en 100 millones de pesos por la venta de droga al mes y entre 90 y 150 millones mensuales por extorsión, pago de protección y de piso.
Nadie se escapa! Taxistas, taqueros, restauranteros, hoteleros, comerciantes… Todos de una forma u otra pagan a estas organizaciones criminales cuotas que les permitan operar con tranquilidad. El castigo por no pagar o hacerlo a un grupo rival es la muerte.
La reciente ola de homicidios en este corredor ha puesto en el mapa mundial este destino turístico que registra anualmente ocupaciones del 85% caso único en el país.
Agencias de seguridad de Estados Unidos y Canadá han enviado personal para investigar y apoyar a las autoridades estatales en la investigación los casos más recientes que ha involucrado sus connacionales. Por ello varios países han emitido alertas de viaje hacia la zona recomendando precaución a sus connacionales.
Quintana Roo es la joya turística de México y esta expandiendo sus capacidades y creciendo por toda su costa, miles de sus habitantes dependen para sobrevivir del ingreso que genera esta industria. Desde el taquero al hotelero, todos están batallando para reponerse de la baja de visitantes que provocó la emergencia sanitaria del COVID, pero hoy el aumento de la violencia pone en riesgo esta recuperación.
El gobierno federal consiente de la importancia de la industria turística para el estado ha enviado 1,445 marinos incluyendo un grupo de inteligencia y otro de fuerzas especiales para reforzar la seguridad en el estado. Un apoyo a todas luces insuficiente dada la longitud del tramo que se les ha encomendado custodiar y lo complejo y diverso que son las actividades ilícitas en la zona.
El gobierno estatal adhiere desde el 2017 el mando de todas las corporaciones policíacas municipales en un Mando Único y más del 50% de sus elementos cuentan con su acreditación policial un promedio de 3.5 policías por cada 100,000 habitantes más los 6,000 guardias en 180 compañías de seguridad privada que se suman a la tarea.
Entonces dónde esta la falla?
Las policías municipales de los centros turísticos del estado solo hacen labores de presencia y extorción al turista, su misión se ha desvirtuado en facilitadores de todas las actividades criminales para evitarse problemas y quejas de los turistas. La policía estatal es insuficiente y a pesar de un importante esfuerzo de modernización en equipamiento y de estrenar un moderno C5 no puede cubrir todo el estado y todas las actividades ilegales que generan más de un millón de turistas que buscan divertirse.
Se necesita coordinar a la toda la industria turística con la policía y la Guardia Nacional para apoyarlos en su tarea. El apoyo de la Fiscalía General de la República en labores de investigación de grupos y carteles criminales, a la UIF que recientemente desmanteló una banda internacional de clonadores de tarjetas de crédito en el estado. A la zona le urge el apoyo federal en labores de inteligencia y delincuencia organizada más que marinos con equipo y armamento de combate paseando por las sus playas y calles.
De no ser así, de fallar en erradicar la ola de delitos de alto impacto, la venta de drogas y la extorsión hay un futuro donde se pueden ver, se llama Acapulco.
