El primer ministro francés, Jean Castex, anunció que en Año Nuevo no estarán permitidos los fuegos artificiales ni las reuniones en la vía pública por la pandemia.
Estarán prohibidas las reuniones, el consumo de alcohol en la vía pública e invitaremos a los municipios a renunciar a los fuegos artificiales.
Cuantos menos seamos, menos riesgos correremos.
Francia también obligará a personal de salud y a los bomberos a que se apliquen la dosis de refuerzo de la vacuna contra el Covid-19.
La orden para las terceras dosis es para evitar que se generalicen focos de contagios que ya están apareciendo en algunos hospitales.
El ministro de Sanidad, Olivier Véran, subrayó en una entrevista que hay que acelerar la vacunación ante la variante Ómicron.
Es mucho, mucho, mucho más contagiosa que Delta, y podría ser mayoritaria en Francia dentro de dos semanas.
Con información de Infobae
