El descubrimiento en estos días de una nueva variante del coronavirus provocó un estremecimiento en buena parte del mundo.
Varios países suspendieron el transporte aéreo, los mercados sufrieron una caída brusca y los científicos se reunieron para determinar los riesgos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) bautizó a la variante “ómicron” y la clasificó como altamente trasmisible, la misma categoría que incluye a la variante delta.
Según lo informado por la OMS, las pruebas iniciales de la variante descubierta en Sudáfrica indican un riesgo mayor de reinfección.
Expertos pidieron que no se produjeran reacciones exageradas antes de conocer mejor la nueva variante del virus.
“Debemos actuar rápidamente y lo antes posible”, dijo el secretario de Salud británico Sajid Javid ante el Parlamento.
En principio no hay indicios de que la variante provoque una enfermedad más grave. Tal como en otras variantes, algunos enfermos son asintomáticos, señalan expertos.
Con información de AP