Redes sociales como Facebook, Twitter y YouTube afirman que han intensificado la lucha en sus plataformas contra la desinformación sobre las vacunas.
La desinformación y las publicaciones promovidas por grupos y cuentas antivacunas han florecido a lo largo de los años en los medios sociales.
Pese a los esfuerzos para frenar el avance de esta epidemia digital, es realmente poco lo que se ha logrado en el frente.
Twitter anunció que borrará las mentiras peligrosas sobre las vacunas tal como ha hecho con otras teorías conspirativas y desinformación relacionadas con el COVID-19.
“Mientras demoran en tomar medidas, se pierden vidas”, dijo Imran Ahmed, director de la organización no gubernamental Center for Countering Digital Hate.
En diciembre, esta ONG halló que 59 millones de cuentas en las redes sociales siguen a los promotores de propaganda antivacunas.
Ante los intentos de reprimir la desinformación sobre las vacunas se alzan clamores contra la censura y algunos difusores recurren a tácticas tramposas para evitar el cierre.
The Associated Press identificó más de una decena de páginas de Facebook y cuentas de Instagram que han difundido información falsa sobre la vacuna contra el COVID-19.
De las más de 15 páginas identificadas por NewsGuard, una empresa tecnológica que analiza la credibilidad de las páginas web, la mitad siguen activas en Facebook.
Una de esas páginas, The Truth About Cancer, con más de un millón de seguidores en Facebook, difunde desde hace años sugerencias infundadas de que las vacunas pueden provocar autismo u otros daños a los cerebros infantiles.
Recientemente la página dejó de publicar información sobre las vacunas y el coronavirus. Ahora indica a los usuarios que se suscriban a su hoja noticiosa y visiten su sitio web para evitar la supuesta “censura”.
Facebook afirmó estar tomando medidas agresivas para combatir la desinformación en nuestras apps al eliminar millones de notas sobre COVID-19 y las vacunas.
Facebook prohibió la publicidad que desalienta el uso de vacunas y dijo que agregó advertencias a más de 167 millones de publicaciones sobre el COVID-19 gracias a su red de socios verificadores de datos.
YouTube
YouTube dio a conocer que eliminó más de 30 000 videos desde octubre, cuando empezó a prohibir las declaraciones falsas sobre las vacunas contra el COVID-19.
Desde febrero de 2020 ha eliminado más de 800 000 videos relacionados con información peligrosa o engañosa sobre el coronavirus.
La lucha contra la desinformación en redes sociales antecede a al pandemia
Antes de la pandemia las redes sociales no se habían esforzado en eliminar la desinformación, dijo Andy Pattison, gerente de soluciones digitales de la Organización Mundial de la Salud.
En 2019, cuando un brote de sarampión asolaba el noroeste de Estados Unidos y causaba decenas de muertes en la Samoa Estadounidense, Pattison rogaba a las grandes empresas tecnológicas que ajustaran las normas sobre desinformación relativa a las vacunas.
Apenas cuando se desató el azote del COVID-19 muchas de esas empresas empezaron a prestar oídos. Ahora se reúne todas las semanas con Facebook, Twitter y YouTube para analizar las tendencias en sus plataformas y las medidas a estudiar.
“Cuando mueres después de vacunarte, mueres de todo menos por la vacuna”, dijo un meme en una cuenta de Instagram con más de 65.000 seguidores para insinuar que el gobierno estadounidense oculta las muertes causadas por la vacuna contra el COVID-19.
“Hay una diferencia muy sutil entre la libertad de expresión y la erosión de la ciencia”, dijo Pattison. Los difusores de desinformación “aprenden las reglas y se mueven en los bordes todo el tiempo”.