Lograr una autosuficiencia alimentaria, mediante procesos sustentables que promuevan la salud de los suelos, es el principal desafío que enfrenta el sector agroalimentario en México.
Para lograr esta meta es necesario que el sector productivo y el gubernamental trabajen de la mano, coincidieron empresarios líderes y funcionarios durante el panel “Transformación Agroalimentaria: el nuevo camino del campo mexicano”, evento virtual organizado por El Financiero.
Nuestro objetivo es la sustentabilidad, tenemos que ser capaces por el tamaño y dimensión que tenemos como panaderos más grandes del mundo, de influir no solo en nuestro país, también en otros países que producen trigo fuerte del panadero, todos tenemos la responsabilidad de acercarnos a estos productos sustentables.
Javier González Franco, director general adjunto de Grupo Bimbo
El 2050 será un año importante para los objetivos sustentables de Grupo Bimbo, por lo que González Franco, indicó que la alimentación debe dirigirse a una nueva dieta, “con alimentos del campo como cereales y leguminosas, por lo que es relevante trabajar en esquemas de producción sustentable”.
Grupo Bimbo ha conseguido que en una cosecha de 5 mil hectáreas de maíz permitiera obtener 30 mil toneladas de producto, mediante prácticas de agricultura sustentable. Este importante logro representó para la empresa una reducción considerable del agua y otros materiales utilizados.
José Cacho, secretario del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) y CEO de Minsa, coincidió con el representante de Bimbo.
El empresario puntualizó que la tecnología, la integración de cadenas de valor y alianzas estratégicas con el gobierno serán los ejes para lograr la autosuficiencia alimentaria y avanzar en el proceso de transformación agroalimentario de México.
Creo que tenemos que tener conciencia que es un esfuerzo de largo plazo, nos vamos a enfrentar a muchos obstáculos pero tenemos la capacidad de superarlo a través de estas alianzas público privadas y de esta visión estratégica, para lograr la sustentabilidad alimentaria y económica, el crecimiento de la producción y la mejora en la vida de los pequeños, medianos y grandes agricultores del país.
La situación actual que enfrenta el campo mexicano se ha beneficiado gracias a la tecnología, estrategias y programas hacia pequeños agricultores, señaló el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos.
Contamos con un arsenal de tecnologías que nos permiten claramente revertir este proceso de erosión del suelo, lo que llamamos buenas prácticas agrícolas actualmente se han ampliado programas de apoyo para proporcionar a jornaleros mejor maquinarias, y se entregan recursos por 11 mil millones de pesos, con lo que se impacta a 2.3 millones de pequeños y muy pequeños agricultores, de este total 33 por ciento son mujeres.
Los panelistas coincidieron en señalar que México no cuenta aún con un programa nacional fuerte de suelos, que se han perdido por la sobreexplotación y algunas malas prácticas.
González Franco destacó que la agricultura regenerativa es una herramienta que ya es impulsa por Grupo Bimbo para remediar esta situación.
El objetivo de la agricultura regenerativa es devolver la salud al suelo, incrementar el nivel microbiológico de la tierra y crear una mayor cantidad de materia orgánica que permita la absorción de gases. Todo esto para mantener la diversidad de los cultivos, pero también para asegurar que se genere menos dióxido de carbono a la atmósfera.
Bram Govaerts, director del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) y José Cacho coincidieron en destacar a México como líder en producción de trigos a nivel global, pero señalaron que el país debe trazar mejores estrategias para lograr una autosuficiencia alimentaria.
Desde México se innova y se genera en campos de los productores, pero también en laboratorios. Las nuevas variedades que alimentan el resto del mundo con el pan, 70 por ciento de los trigos a nivel global provienen de las investigaciones hechas en México y también la parte del maíz proviene del CIMMYT, y 50 por ciento de los maíces a nivel global.
Bram Govaerts
