México espera poder comenzar en diciembre la vacunación contra el COVID-19, dijo el canciller, Marcelo Ebrard.
Sin embargo, esto ocurrirá solo si se cumplen los plazos, requisitos y autorizaciones dentro y fuera del país de los proyectos de las farmacéuticas con las que tiene acuerdos, como Pfizer y AstraZeneca
El Gobierno pretende vacunar a casi toda la población nacional, de unos 130 millones habitantes, mediante convenios firmados.
Estos convenios son con las farmacéuticas Pfizer y la británica AstraZeneca. También se adhirió con el mismo fin a COVAX, una alianza multilateral impulsada por la Organización Mundial de la Salud.
Ebrard dijo que las autoridades mexicanas están pendientes del trámite iniciado ante la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) por parte de Pfizer.
Estimamos en cinco días hábiles (después de ese visto bueno) el que pueda llegar esta vacuna a México.
Esto ocurrirá desde una planta en Estados Unidos o Europa, de donde es el socio de Pfizer en la iniciativa, la farmacéutica alemana BioNTec, agregó el funcionario.
Para agilizar el proceso, detalló, Pfizer remitirá un expediente técnico al regulador mexicano, Cofepris, que iniciará el mismo proceso de análisis de la FDA.
Ya se está produciendo la vacuna de AstraZeneca
En el caso de AstraZeneca, cuya vacuna será distribuida por México en una alianza con Argentina, explicó que el antígeno ya “está siendo producido”.
En síntesis, es inminente que, si todo esto sale como hemos dicho y la autoridad regulatoria considera que se puede aprobar, como esperamos que se apruebe en Estados Unidos y Europa, México estará en diciembre también iniciando su proceso
Sin embargo, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, dijo que la posibilidad de iniciar la vacunación dependerá de las farmacéuticas. Es decir, que tengan “la capacidad real de surtir al mercado mexicano”.
Con información de Reuters
