La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) denunció que los recientes apagones eléctricos en 21 estados del país no son resultado de un aumento en la demanda de energía, sino de las deficiencias de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en la expansión y modernización de la infraestructura energética.
Según datos del Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (PRODESEN), de un total de 232 proyectos planeados por la Secretaría de Energía (SENER), la CFE completó únicamente 9, lo que representa el 3.8% del total. Esto ha impedido la adición de nuevas centrales eléctricas y ha limitado la inversión en las capacidades de transformación y transmisión.
El organismo empresarial también señaló que el proyecto para generar 8,858 megawatts (MW) que debería haberse concluido este año, ahora se espera que se complete en un lapso de cuatro años según el último reporte de PRODESEN.
La Coparmex, presidida por José Medina Mora, hizo un llamado a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) para que faciliten la incorporación de nuevas plantas generadoras, principalmente de iniciativa privada.
Se hizo énfasis en la urgencia de una inversión anual de aproximadamente 9,000 millones de dólares para ampliar y actualizar las redes de distribución y transmisión, y propuso la actualización de normativas para aumentar la capacidad de generación en sitio de 500 KiloWatts a 1 MW.
El Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) reactivó la alerta operativa del sistema eléctrico nacional debido a una reserva de capacidad de generación por debajo del 6% en el pico de demanda.
La situación crítica, que aún no ha descendido del 3%, podría incrementar la posibilidad de apagones escalonados a nivel nacional.
El día anterior, se emitieron dos alertas adicionales y se registró un pico de consumo de 49,887 megawatts a las 16:05 horas.
El 8 de mayo, a las 14:26 horas, Cenace informó que la relación entre oferta y demanda de energía estaba críticamente balanceada, con una reserva por debajo del 6%.
Este estado de alerta se activó tras la salida de operación de 11 plantas eléctricas, incluyendo tres ciclos combinados en Tamaulipas y Nuevo León operados anteriormente por Iberdrola y ahora parte de la CFE.
Estas interrupciones resultaron en una reducción de la generación esperada de 1,668 megawatts, equivalente al 3.3% del pico de demanda.
