Las principales economías globales se encaminan hacia un “aterrizaje suave” en el contexto económico actual, según lo indicó Agustín Carstens, director general del Banco de Pagos Internacionales, en una reciente declaración.
Carstens destacó que, a pesar de una significativa reducción de la tasa de inflación mundial, que ha disminuido a menos de la mitad en el último año, la batalla contra la inflación aún no se ha ganado completamente.
Esta situación se da en un momento en que los responsables de política monetaria de diferentes países deliberan sobre la posibilidad de reducir las tasas de interés, las cuales se encuentran en niveles máximamente elevados desde hace décadas.
El optimismo de Carstens se basa en la observación de que la desaceleración de la inflación se ha logrado con un impacto mínimo en la economía real. Sin embargo, subrayó que el logro de un aterrizaje suave para las economías no está asegurado, dado que la inflación aún supera los objetivos establecidos por los bancos centrales.
En este contexto, se espera que algunos de los principales bancos centrales, incluyendo el Banco Central Europeo, la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco de Inglaterra, puedan comenzar a ajustar sus políticas en los próximos meses, en un esfuerzo por equilibrar el crecimiento económico con la necesidad de mantener la inflación bajo control.
Carstens también señaló que existen diversos factores de presión a medio plazo, como la desglobalización, la fragmentación económica, tendencias demográficas desfavorables y la imperiosa necesidad de combatir el cambio climático, los cuales podrían mantener los precios elevados.
