En el contexto de las recientes protestas ocurridas en Cuba debido a la aguda crisis económica que enfrenta el país, el presidente Miguel Díaz-Canel ha emitido una respuesta oficial.
El mandatario cubano destacó la apertura al diálogo por parte del gobierno con los manifestantes, quienes expresaron su descontento por la falta de servicios básicos como electricidad y alimentos, así como por la devaluación del peso cubano.
Además, las demandas se extendieron a la exigencia de libertades políticas. Díaz-Canel, sin embargo, atribuyó parte de la crisis a la influencia de Estados Unidos y a las sanciones impuestas por esta nación, apuntando también a la comunidad de exiliados cubanos en Miami como parte del problema.
Las manifestaciones, que se desarrollaron en al menos cuatro ciudades importantes, incluyendo Santiago de Cuba, fueron marcadas por una considerable movilización ciudadana.
A pesar de la propuesta de diálogo por parte del gobierno, las protestas fueron recibidas con represión y detenciones por parte de las autoridades, aunque el número exacto de arrestados no ha sido confirmado oficialmente.
Por su parte, desde Estados Unidos, diplomáticos instaron al gobierno cubano a respetar los derechos humanos de los manifestantes y a buscar soluciones a las necesidades de la población, tal como se reflejó en un mensaje publicado por la Embajada de EE.UU. en La Habana en la plataforma X.
