Por primera vez en la historia, la Cámara de Representantes ha destituido a su presidente mediante una votación, dejando a la cámara baja del Congreso de Estados Unidos sin un líder electo. Esta sorpresiva decisión profundizó el nivel de agitación política en Washington.
La destitución se produjo luego de que el entonces presidente, Kevin McCarthy, del Partido Republicano, decidiera seguir adelante con la votación de la moción de destitución a pesar de la exasperación expresada por algunos de sus colegas republicanos.
Antes de la votación, McCarthy había salido de su oficina proyectando calma, pero tras la votación abandonó la cámara sin la autoridad de su mazo.
La Cámara de Representantes se encuentra en un punto crítico, aún recuperándose del asedio al Capitolio del 6 de enero de 2021, enfrentando divisiones internas y con el liderazgo global de Estados Unidos en cuestión.
En medio de esta atmósfera, la cámara debe tomar decisiones urgentes sobre asuntos como el financiamiento de la defensa de Ucrania y la posibilidad de un juicio político contra el presidente Joe Biden.
La tensión entre republicanos y demócratas ha alcanzado niveles críticos. Brian Fitzpatrick, representante republicano de Pensilvania, advirtió sobre las consecuencias de dejar vacante la presidencia de la cámara, mencionando el potencial cierre del gobierno y otros riesgos internacionales.
En una reunión privada antes de la votación, la mayoría de los republicanos apoyaron a McCarthy. Sin embargo, en una reunión separada, los demócratas destacaron su lealtad al expresidente Donald Trump y su alineamiento con el ala más conservadora de su partido.
Finalmente, se unieron bajo el liderazgo del demócrata Hakeem Jeffries para distanciarse del asunto, considerándolo un problema republicano.
Durante la votación en la cámara, el representante Matt Gaetz, quien había iniciado el proceso de destitución, presentó sus argumentos, mientras McCarthy permanecía cerca, optando por no defenderse verbalmente, sino dejar que sus aliados más cercanos hablaran por él. Al final, ocho republicanos y todos los demócratas votaron a favor de su destitución.
Tras ser destituido, McCarthy fue reemplazado provisionalmente por Patrick McHenry de Carolina del Norte. Michael McCaul, republicano de Texas y presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, expresó su preocupación por la falta de liderazgo y el mensaje que esto envía a nivel internacional.
Las repercusiones de la destitución de McCarthy aún están por verse. Los republicanos deberán encontrar un nuevo líder, mientras lidian con divisiones internas. Por su parte, McCarthy, en una conferencia de prensa posterior, dejó en claro que tiene intenciones de usar su influencia política contra sus opositores.
Con información de AP
