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La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció el martes los planes de estudio para primaria y secundaria que se aplicarán en el ciclo escolar 2023-2024, que comenzará el 28 de agosto.
A la sombra de debates sobre la impresión y distribución de libros de texto gratuitos, la SEP ha revelado que estos programas dejarán de segmentar conocimientos por materias y se adoptará un enfoque basado en proyectos. Estas fases de aprendizaje se estructuran según edades, abarcando desde menores de cero hasta los 15 años.
Leticia Ramírez, Secretaria de Educación, comunicó en una conferencia de prensa que, tras su anuncio, se publicarían los programas en el Diario Oficial de la Federación (DOF), allanando el camino legal para continuar con la impresión y distribución de libros.
Con esta actualización, se cumple un requisito esencial: que los libros estén basados en planes de estudio vigentes. Sin embargo, a pesar de la tardanza en esta formalidad, ya se han distribuido más de 90 millones de ejemplares por todo México.
El primer decreto reemplaza completamente los planes de estudio previos, revocando acuerdos de 2011, 2017 y 2019 relacionados con educación básica. Los dos decretos subsecuentes se centran en las fases de aprendizaje, detallando desde la Educación Inicial hasta la sexta fase.
Aunque la SEP no ha expuesto detalles específicos de cómo se implementarán estos planes, sí enfatizó que corresponde al gobierno federal decidir sobre su diseño.
Sin embargo, citando el artículo tercero constitucional, se menciona que se considerarán opiniones de gobiernos estatales y diversos actores sociales. Organizaciones como la Unión Nacional de Padres de Familia han cuestionado este punto, argumentando que no se consultó a tutores.
Algunos gobiernos locales, como el de Chihuahua, han desafiado los nuevos libros de texto, lo que ha derivado en acciones legales que, hasta ahora, han detenido su distribución en algunas áreas.
