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Un juez rechazó el recurso presentado por la defensa de Mario Marín para que el exgobernador de Puebla llevará su proceso penal en libertad, por lo que el “Gober precioso” continuará recluido en el Cefereso no. 1 “Almoloya”, también conocido como el Altiplano.
Tras dos años de permanecer recluído en prisión preventiva, el exgobernador de Puebla solicitó que se le impusieran nuevas disposiciones en las que también se pedía residir en un lugar determinado, así como acudir al juzgado correspondiente de manera programada en relación a la probable responsabilidad en el delito de tortura contra una periodista.
Tanto la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR) como la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra de la Libertad de Expresión (FEADLE) presentaron las pruebas suficientes para acreditar la necesidad de mantener la medida cautelar.
Entre los argumentos expuestos por las fiscalías estuvieron el riesgo que el imputado representa para la víctima y testigos, riesgo de fuga, falta de arraigo del imputado en el lugar en que se lleva a cabo el proceso penal, así como la explicación de que los retrasos en el proceso penal se deben a recursos que la propia defensa a implementado.
Mario Marín fue gobernador del estado de Puebla entre febrero de 2005 y enero de 2011, y se le acusa está acusado de valerse de las instituciones públicas de la entidad para intereses propios y de ordenar, desde su posición como funcionario público, la tortura de la periodista Lydia Cacho.
El “Gober precioso” fue detenido en Acapulco, Guerrero, en febrero de 2021 tras haber permanecido en paradero desconocido durante varios años huyendo de la justicia.
