La Agencia Reguladora de Medicamentos de la Unión Europea declaró este jueves que, según los expertos, la vacuna de AstraZeneca contra el COVID-19 no está vinculada con un aumento del riesgo de coágulos sanguíneos y los beneficios superan a los riesgos.
El fallo de la Agencia Europea podría permitir que los países que suspendieron la aplicación de la vacuna tengan la confianza de retomar su uso.
La directora del organismo europeo regulador, Emer Cooke, dijo que la agencia no puede descartar definitivamente un vínculo entre ciertos tipos raros de coágulos y la vacuna, y que los expertos recomiendan advertir a los médicos y los receptores sobre los posibles riesgos.
La agencia recomendó agregar una descripción a los prospectos de la vacuna para que médicos y pacientes tengan conciencia del riesgo de estos coágulos raros.
Varios países europeos habían suspendido la aplicación de la vacuna desde la semana pasada ante temores por la aparición de coágulos en algunas personas inmunizadas.
Los coágulos que se forman en los brazos, las piernas u otras partes pueden liberarse y llegar al corazón, los pulmones o el cerebro donde provocan ataques cardíacos, accidentes cerebro-vasculares u otros bloqueos fatales.