El gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, reiteró su disposición a aclarar las sospechas que, dijo, se han sembrado en su contra con propósitos políticos y electorales.
Sostuvo que no se le imputan delitos relacionados con contrabando de combustibles, narcotráfico, colaboración con el crimen organizado o cualquier otro similar o equivalente.
Tras recibir la notificación formal sobre la solicitud de procedencia por parte de la Cámara de Diputados, el Gobernador difundió un comunicado.
Ahí explicó que los hechos que motivan la solicitud derivan de “un supuesto impago de contribuciones fiscales, derivadas de la venta de un departamento”.
Agregó que la propiedad se reportó tanto en sus declaraciones patrimoniales, como las de su esposa a finales de 2019.
Consideró que la imputación de lavado de dinero proviene de que el dinero de la venta del departamento se canalizó a través del sistema financiero; mientras que la presunta comisión del delito de delincuencia organizada en la supuesta participación de varios integrantes de su familia.
El Gobernador detalló que desde las primeras filtraciones sobre supuestas investigaciones en su contra o de su familia, solicitó comparecer; sin embargo, “en ningún momento se me concedió ese derecho, como sí ha sucedido en otros casos”.
Todas estas acusaciones serán cabalmente desmentidas durante los procedimientos. Extrañamente en la solicitud presentada por el Ministerio Público se insertan suposiciones y especulaciones contenidas en otras denuncias que nada tienen que ver con las condiciones que, para efectos del desafuero, se someten a consideración de la Cámara de Diputados. Asimismo, la solicitud no comprende un solo elemento o evidencia que conduzca a afirmar que la investigación en curso está relacionada o proceda de la actuación de agencias de Estados Unidos
