Las variantes del nuevo coronavirus obligan a las farmacéuticas a redoblar esfuerzos al desarrollar vacunas para una enfermedad que podría permanecer activa durante años.
Las vacunas fabricadas por Moderna y la asociación Pfizer-BioNTech ya están en uso.
Mientras tanto, nuevos estudios muestran que dos más, las de Johnson & Johnson y Novavax, contienen potentes respuestas contra las primeras formas del virus.
Esto podría allanar el camino para autorizaciones rápidas en Estados Unidos para la vacuna de J&J y en el Reino Unido para la vacuna de Novavax.
Las mutaciones, sin embargo, probablemente tendrán resistencia parcial a algunas vacunas y tratamientos con anticuerpos.
En un ensayo de última etapa, se descubrió que la inyección de J&J tenía una efectividad del 72 por ciento en EU, pero solo 57 por ciento en estudios realizados en Sudáfrica.
La inyección de Novavax, 89 por ciento efectiva en el Reino Unido, pero solo 49 por ciento efectiva en Sudáfrica.
Incluso antes de estos resultados, las pruebas de laboratorio con otras vacunas sugirieron que las dosis probablemente serían menos potentes contra la nueva variante de Sudáfrica.
Los nuevos resultados ofrecen una clara indicación de que las vacunas no funcionarán tan bien contra al menos una de las mutaciones emergentes.
