El jefe de despacho de la Casa Blanca Mark Meadows presionó este viernes al titular de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), Stephen Hahn, para que autorice el uso de emergencia de la vacuna de Pfizer contra el coronavirus o podría ser despedido, según funcionarios allegados.
La vacuna producida por Pfizer y su socio alemán BioNTech obtuvo el jueves un respaldo crucial de un panel de asesores externos de la FDA.
La autorización de ésta, que se esperaba fuera este fin de semana, es el siguiente paso necesario para que la vacuna llegue al público.
Sin embargo, la FDA, al ser un organismo independiente del panel revisor, no está obligada a cumplir la recomendación dada.
El jefe de despacho habría advertido a Stephen Hahn que su trabajo estaba en riesgo si no se autorizaba el uso de emergencia antes del sábado, de acuerdo con fuentes cercanas.
De acuerdo con la información compartida, el jefe de la FDA respondió que pediría a lo reguladores aprobar la vacuna.
Stephen Hahn no estuvo de acuerdo con la forma en que se interpretó su conversación con Mark Meadows y se pronunció al respecto.