El Semáforo de Alerta Epidemiológica no será un amago contra gobernadores, pero sí habrá claridad sobre las implicaciones legales de sus decisiones.
El subsecretario de Prevención y Promoción a la Salud, Hugo López-Gatell, negó que este da hayan tenido un encuentro ríspido; sin embargo, sí aprovechó para revelar que varios gobernadores no asisten a estos encuentros semanales.
Mencionó que las preocupaciones de los gobernadores son válidas, y que la Secretaría de Salud reconocen el trabajo que cada uno de los 32.
No obstante, las opiniones encontradas son específicamente en la necesidad de conciliar dos factores dentro de esta pandemia: la salud y la vida de la población, que requiere medidas como garantizar la distancia social, y la otra, los efectos adversos en la economía, la seguridad, y el bienestar de la población que también implica la salud y la vida.
El subsecretario señaló que le interesa que la gente entienda que es difícil conciliar esos dos factores.
Inconformidad por responsabilidades
Señaló que el elemento crítico de este encuentro con gobernadores fue sobre compartir la responsabilidad que está establecido en la Constitución, y en la Ley General de Salud.
Dijo que cada estado tiene sus propias características, por lo que no se pueden aplicar generalidades a situaciones particulares de cada entidad, e incluso, municipios.
Mencionó que el semáforo no está sujeto a intereses políticos, cuando su origen es sólo un instrumento jurídico.
“Al hacer la revisión del lineamiento del texto del semáforo, se identificó que era importante dejar preciso e implícito cuál es la responsabilidad federal y estatal”
Dijo que ese componente generó inquietudes, por lo que se decidió dejarlo muy en claro.
En la misma sesión, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero propuso un foro de diálogo para los temas que no son técnicos, por lo que convocó a las oficinas federales, la Secretaría de Economía, la del Trabajo, la Secretaría de Salud, IMSS, ISSSTE.
El subsecretario señaló que la población, también debe comprender que desconfinar implica el peligro de rebrote.
