La recomendación a Obispos de suspender la misa dominical fue realizada por la Conferencia Episcopal Mexicana como parte de las medidas implementadas para reducir la propagación del coronavirus.
En un comunicado, la CEM sugirió a los Obispos suspender los encuentros para grupos numerosos como retiros, asambleas, congresos, jornadas y catequisis; asimismo, las celebraciones eucarísticas dominicales.
Sin embargo, dejó abierta la posibilidad de que cada Obispo, en su jurisdicción, decida dispensar la obligatoriedad de la misa dominical, pero aclaró que a pesar de que se suspenda la misa dominical ésta no dejará de realizarse, así sea de manera privada.
También instó a facilitar, en la medida de lo posible, que las Eucaristías sean transmitidas a través de plataformas digitales, a fin de que los fieles puedan unirse a los misterios de la fe a pesar de que se se haya tomado la medida de suspender la misa dominical.
Asumamos estas medidas de emergencia nacional con serenidad, sabiduría y responsabilidad como manifestaciones de amor, solidaridad y cuidado entre hermanos. Como pastores de esta Iglesia mexicana encomendamos a todas las personas de nuestro país, y del mundo entero a la protección de Nuestra Señora, Santa María de Guadalupe, Emperatriz de América.
