En la madrugada del viernes, se activaron sistemas de defensa antiaérea en una base aérea clave y un centro nuclear en Isfahán, Irán, tras detectar la presencia de drones.
La acción defensiva se produce en un contexto de alta tensión con Israel, que ha aumentado tras los recientes ataques de Irán en la región. Aunque no se ha confirmado oficialmente un ataque en curso, la situación en Isfahán ha generado preocupación internacional, sin que hasta ahora funcionarios iraníes o israelíes hayan hecho declaraciones concretas al respecto.
Medios estadounidenses, citando fuentes no identificadas, han sugerido la responsabilidad de Israel en estos movimientos, coincidiendo con el cumpleaños del líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei.
La tensión regional se ve agravada por la reciente escalada de hostilidades, incluyendo los ataques de Irán en Israel y las represalias israelíes en Siria.
En Irán, la situación se ha mantenido bajo control, según informes de la televisión estatal que aseguran la seguridad de todas las instalaciones nucleares en la zona.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica ha confirmado que no hay daños en dichas instalaciones.
Mientras tanto, la actividad aérea se ha visto temporalmente perturbada, con cambios en las rutas de vuelos internacionales y suspensiones temporales de vuelos comerciales, aunque la normalidad se ha restaurado más tarde.
Los detalles del incidente siguen siendo objeto de seguimiento por parte de las autoridades competentes.
