La noche del pasado martes marcó el fin de la reclusión de Raymundo “N”, quien fuera alcalde de Toluca, en el centro penitenciario de Santiaguito, ubicado en Almoloya de Juárez.
Esta liberación fue posible gracias a una modificación en las medidas cautelares dictaminadas por el Poder Judicial del Estado de México, tras una audiencia el lunes 25 de marzo donde se le concedió la libertad bajo fianza, establecida en un millón de pesos.
Como condiciones para su libertad, a Raymundo “N” se le impuso el uso de un brazalete electrónico para su monitoreo, la obligación de presentarse ante el juzgado cada semana y el mandato de no acercarse a su exsuegro Emilio “N” ni a su exesposa, Viridiana Rodríguez, quienes lo señalan por el delito de secuestro exprés.
Este caso se origina en acusaciones por parte de la familia de Viridiana Rodríguez, quienes sostienen que Raymundo “N” participó en un secuestro exprés. No obstante, la defensa argumenta la ausencia de evidencias sólidas y la falta de comparecencia de la víctima y de Rodríguez en las audiencias.
La controversia se extiende a la supuesta existencia de comunicaciones incriminatorias en dos móviles, aún no presentadas como pruebas.
La situación de Raymundo “N” se complicó inicialmente por evasión de la justicia y cometer el delito siendo funcionario público, pero ahora enfrentará el proceso en libertad, sujetándose a las restricciones dictadas por la corte, mientras continúa la investigación que inició con su detención en enero por el delito de privación ilegal de la libertad de un familiar de su exesposa.
