La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha optado por mantener las tasas de interés sin cambios, manteniéndolas en el intervalo del 5.25% al 5.5%, nivel que no se alcanzaba desde el año 2001.
Esta decisión, tomada de forma unánime por el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), subraya la intención del ente regulador de asegurar que la inflación retorne de forma sostenible hacia su objetivo del 2% antes de considerar una reducción de las tasas.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, está programado para ofrecer un discurso que se anticipa con interés, en busca de detalles adicionales sobre el futuro curso de la política monetaria.
En su comunicado, la Fed reiteró su compromiso de ajustar la política monetaria como sea necesario para enfrentar cualquier riesgo que impida alcanzar sus objetivos inflacionarios y económicos. Subrayó que es relevante monitorizar una amplia gama de indicadores, incluyendo las condiciones del mercado laboral, las presiones inflacionarias, las expectativas de inflación, y los acontecimientos financieros e internacionales. La institución observa que, aunque la inflación ha disminuido en el último año, todavía se considera elevada.
Recientes indicadores económicos apuntan a una expansión sostenida de la actividad económica en Estados Unidos, con un crecimiento del empleo que, aunque más moderado, sigue siendo robusto. E
Este anuncio se produce tras revelarse que el Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos creció un 3.1% en 2023, superando las expectativas y el crecimiento del 2.1% registrado en 2022.
En diciembre, el país experimentó un incremento en la creación de empleo y mantuvo una tasa de desempleo estable, evidenciando la fortaleza del mercado laboral a pesar de las elevadas tasas de interés.
