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La Cámara de Representantes de Texas, EU, liderada por el Partido Republicano llevó este sábado al fiscal general del estado Ken Paxton a juicio político por cargos que incluyen sobornos y abuso de la confianza pública.
La decisión de los legisladores texanos representa un revés histórico y repentino para un colega republicano que ascendió hasta convertirse en una estrella del movimiento legal conservador a pesar de años de escándalos y supuestos delitos.
La votación da pie a una suspensión inmediata de Paxton a su cargo hasta que se dé a conocer el resultado del juicio en el Senado del Estado, y le otorga al gobernador republicano Greg Abbott la facultad para designar a alguien más para desempeñarse de forma interina.
La votación de 121 a favor y 23 en contra representa una caída abrupta para uno de los combatientes jurídicos más reconocidos del Partido Republicano, quien en 2020 solicitó a la Corte Suprema que revirtiera el triunfo electoral del presidente Joe Biden sobre Donald Trump.
Paxton se ha convertido en el tercer funcionario de la entidad estadounidense en ser llevado a juicio político en los casi 200 años de historia del estado de Texas.
Con información de AP