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El presidente Joe Biden tomó medidas drásticas el domingo, ordenando a aviones militares estadounidenses derribar un objeto en el cielo que se consideraba una amenaza para los aviones comerciales. El objeto fue detectado por primera vez en Montana y seguido sobre el lago Huron antes de ser derribado.
Esta acción se produce después de que objetos similares fueran disparados en Alaska y Canadá en los últimos días. A pesar de que el gobierno aún no ha identificado con precisión los objetos, la preocupación está aumentando sobre la posible responsabilidad de China, ya que Washington ha mencionado un programa de vigilancia aérea de Beijing a gran escala.
El derribo del objeto en el lago Huron es el tercero en una semana y es sin precedentes, ya que no se sabe cuándo fue la última vez que un objeto no autorizado o desconocido fue derribado sobre territorio estadounidense.
La investigación continúa para identificar con precisión los objetos y determinar si representan una amenaza real para la seguridad nacional.
