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Noriteru Fukushima, el embajador de Japón en México, es uno de los muchos extranjeros que se han enamorado de este país y han adoptado sus costumbres.
En su caso, este 2 de febrero, el Día de la Candelaria, Fukushima cumplió con su compromiso de repartir tamales en Paseo de la Reforma; además, compartió tortas de tamal conocidas como “guajolotas”.
El embajador aprovechó para tomarse fotografías con la gente y en el Ángel de la Independencia.
Desde su estancia en México, a través de su perfil en redes sociales, Fukushima demuestra su cariño por la cultura y la gastronomía mexicanas, compartiendo su experiencia en su visita a otras ciudades del país como Monterrey, donde probó el platillo de cabrito que le recomendó el astronauta japonés Koichi Wakata.
La popularidad de las redes sociales ayuda a muchos extranjeros ganarse el cariño de los mexicanos a través de sus publicaciones que muestran su apreciación por la cultura, la gastronomía y las tradiciones del País.
Otro ejemplo es Christopher Landau, quien, junto con su esposa Caroline, se han convertido en fans de lugares, costumbres y hasta del jabón zote.
