Ricky Martin se pronunció sobre las semanas difíciles que atravesó como “víctima de la mentira”, luego de que el caso en su contra que se inició en Puerto Rico quedó cerrado.
Un tribunal de Puerto Rico “archivó” una orden de restricción emitida contra Martin, según un portavoz judicial que habló con The Associated Press.
Explicó que no se pudo defender antes públicamente porque el proceso le exigía guardar silencio hasta poder hablar frente a un juez.
A principios de julio, un juez emitió una orden de restricción contra el cantante puertorriqueño. La orden se presentó bajo la ley de violencia doméstica de Puerto Rico, pero en ese momento la policía no proporcionó más detalles, incluyendo quién la había solicitado.
La audiencia de revisión del caso se desarrolló el jueves a puerta cerrada y las partes participaron de forma virtual. Afuera del tribunal, esperaban varios periodistas y camarógrafos.
Cuando se emitió la orden de restricción, el diario puertorriqueño El Vocero dijo que esta establecía que Martin y la otra persona habían salido durante siete meses. Citaba la orden al decir que se separaron hacía dos y que, según el peticionario, Martin no aceptó la separación y fue visto merodeando cerca de su casa al menos tres veces. La AP no obtuvo copia de la orden. Martin tiene su residencia en Los Ángeles, donde vive con su esposo y sus hijos.
El cantante, que se presentará este viernes y sábado en concierto junto a la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles en el emblemático Hollywood Bowl, señaló en el video que “la mentira” le hizo “mucho daño” a él y a toda su familia, incluidos sus padres, su esposo y sus hijos.
Con información de AP