La llegada de un nuevo año se basa en herencias de varias culturas con fundamento astronómico. Así lo sostiene el investigador del Instituto de Astronomía de la UNAM, Daniel Flores Gutiérrez.
El responsable del Anuario del Observatorio Astronómico Nacional dijo que este tipo de celebraciones se relaciona con los calendarios Romano, Juliano Gregoriano, éste último vigente y que rige en la mayor parte de los países del mundo.
A propósito del inicio del año 2022, se recordó que el calendario Gregoriano fue instaurado en 1582 por el Papa Gregorio XIII, cuyo inicio del ciclo se estableció como el primero de enero. Por ello, este 2022, se cumplirán 440 años de conmemorar este hecho.
Para fijar el conteo, se requiere de un calendario que vincule el pensamiento humano, a fin de entender la naturaleza, y la bóveda celeste, observando el movimiento de los astros, particularmente el Sol y la Luna.
¿Cómo se contaban los años antes de la era Cristiana?
En la Antigua Roma, el año arrancaba en lo que ahora conocemos como marzo, pero en enero, los cónsules asumían el gobierno, por lo que Julio César, en el año 47 a.C., creó el Calendario Juliano.
Los romanos dedicaron el día 1 de enero a Jano, el “Dios de las entradas y los comienzos”. Este mes recibió su nombre en su honor, que tenía dos caras, una que miraba adelante y otra atrás. El denominado Calendario Juliano en memoria del emperador permaneció válido durante casi 16 siglos, hasta la llegada del Gregoriano.
Se sabe que el inicio del Mesoamericano es el 2 de febrero del Juliano, pero cuando vino la corrección y se estableció el Gregoriano (actual), se ajustó al 12 de febrero.
¿En dónde se recibe primero el Año Nuevo y dónde al final?
El investigador del Instituto de Astronomía, explica que al vivir en una esfera, los humanos describimos en cada punto, ciudad y población en el mundo, una circunferencia vista desde los polos, y por ello en el caso de Oceanía es el primer continente en iniciar el año.
Entonces, es debido a la rotación de la Tierra y a los husos horarios que el primer sitio en recibir el nuevo año es Kiribati, en las islas Caroline, y Kiritimati; mientras que Samoa Americana es el último lugar en terminar el año saliente.
Kiribati, república insular del Pacífico Central, incluye 33 atolones (islas coralinas oceánicas), con lagunas y playas de arena blanca, varias se encuentran desiertas. Está a seis mil 619 kilómetros.
En tanto, Samoa Americana o Samoa Estadounidense es uno de los territorios no incorporados de los Estados Unidos bajo supervisión del Comité Especial de Descolonización de las Naciones Unidas. Se localiza al oeste de las Islas Cook, a dos mil 700 kilómetros de Nueva Zelanda y a siete mil 800 de San Diego, California.