Los niños de todas las edades pueden estar tranquilos: Santa Claus llegará esta Nochebuena y una segunda Navidad con Covid-19 no le detendrá.
Cada año, la misión comienza cuando los radares en el norte de Canadá y Alaska detectan la señal infrarroja que emite la nariz de Rodolfo.
Eso afirman en la operación militar conjunta de Canadá y Estados Unidos que desde hace 66 años sigue el rastro de Papá Noel en su misión global y asegura a todo el mundo -primero a través del teléfono fijo y ahora por iPhone, Android, OnStar, Facebook, Youtube, entre otros- que está de camino con un trineo lleno de juguetes y una necesitada dosis de alegría.
En lo que se ha convertido en una popular tradición, el Comando Norteamericano de Defensa Espacial (NORAD, por sus siglas en inglés), con base en Colorado, ofrece actualizaciones en tiempo real sobre el progreso de Santa Claus el 24 de diciembre, desde las 4 de la madrugada y hasta la medianoche MST. El Rastreador de Santa del NORAD permite a las familias seguir a Santa Claus en tres dimensiones mientras recorre el Pacífico Sur, Asia, África, Europa y América.
Santa Claus puede seguirse a través del sitio web NORADT SANTA en donde podrás elegir tu ubicación, dimensiones de observación, cálculo de la llegada a tu ciudad; asimismo puede observarse en las etiquetas #NORADTracksSanta y @NoradSanta en Twitter, o con las apps asociadas. Además, se puede escribir a [email protected] para recibir las últimas actualizaciones sobre su posición.
Para los preocupados por la seguridad de Santa -o la suya propia-, es probable que Papá Noel lleve mascarilla en sus visitas, y por supuesto lleva guantes, señaló Schlachter. Para los aficionados a los datos, el sitio web del NORAD ofrece más datos, como un peso estimado de 54.600 toneladas de juguetes al despegar y una fuerza de propulsión de nueve PR, o poder de reno.
Como en cualquier cuento de Navidad, el origen del programa se ha contado durante generaciones.
“Santa lo dirige todo”, dijo Schlachter. “Nosotros sólo le seguimos la pista”.