Italia, el primer país europeo golpeado por la pandemia, comenzó a movilizarse después de su cuarentena de dos meses.
En total, 4,4 millones de italianos pudieron regresar al trabajo, y las restricciones en la movilidad se relajaron.
Bélgica permitió que algunas compañías reabrieran oficinas, aunque fomenta el trabajo remoto.
Como a los italianos, griegos, españoles y muchos otros en Europa, a los belgas les indicaron que usaran mascarillas en el transporte público.
Las personas en España, otro de los países más afectados en Europa, se aventuraron por primera vez para cortarse el cabello o pedir comida para llevar, pero muchas pequeñas tiendas seguían cerradas ya que los propietarios buscan cumplir con las estrictas normas de salud e higiene.
Portugal también alivió las medidas de confinamiento y permitió que abrieran las pequeñas tiendas.
Islandia reabrió muchos de sus negocios tras anunciar que ahí ya está controlado el virus.
Líbano permitía que abrieran los restaurantes a 30 por ciento de su capacidad durante el día a partir del lunes.
India permitió que se reanudaran algunas actividades económicas después de una paralización de cinco semanas, incluso cuando el ritmo de las infecciones se ha acelerado ligeramente.
Con información de AP