En universidades de Estados Unidos continúan las protestas contra la política estadounidense hacia Israel y la guerra en Gaza, generando un amplio debate sobre si estas manifestaciones son antisemitas o simplemente antibélicas.
Las protestas, que han incluido a estudiantes judíos, han provocado un aumento en la retórica política. Figuras como el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, han criticado duramente estas acciones, calificándolas de antiamericanas y argumentando que el presidente Joe Biden ha fallado en condenar estos actos, lo que él considera un síntoma de falta de liderazgo.
Por otro lado, figuras como el senador Tom Cotton y el gobernador de Texas, Greg Abbot, han expresado posiciones severas contra los manifestantes, etiquetándolos de proterroristas y promotores de odio, respectivamente. Sin embargo, la Casa Blanca ha reiterado su apoyo al derecho de protesta pacífica, aunque condena cualquier forma de retórica violenta o antisemitismo.
Además, las manifestaciones también han demandado a las instituciones educativas que detengan sus inversiones en el sector privado israelí y promuevan una mayor transparencia en estas relaciones, especialmente con la industria militar.
