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Los habitantes del Pueblo de Xoco, ubicado en la Ciudad de México, manifestó su descontento frente al centro comercial Mitikah, denunciando la falta de agua potable y otros impactos negativos causados por la construcción de este megaproyecto.
La Asamblea Ciudadana del Pueblo de Xoco, junto a ProDESC y otros grupos de Pueblos y Barrios Originarios de la Ciudad de México, organizaron un tendedero de denuncias para resaltar cómo estos proyectos contribuyen a la segregación y exclusión de las comunidades originarias.
Las demandas se centran en la nula supervisión de la calidad del agua suministrada por parte del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX), pues los residentes han observado alteraciones en sus características.
Por ello, los residentes de Xoco enfrentan desafíos como el desabasto de agua, lo cual afecta sus actividades diarias y calidad de vida.
“A los tinacos les llega un hilo de agua recién a las cuatro de la madrugada, y no creo que los residentes de Mitikah estén viviendo lo mismo que nosotras; el agua muchas veces sale caliente y dudamos de su calidad para nuestro uso”, resaltó Marcelina, habitante del pueblo y quien acudió a la manifestación pacífica.
Durante la protesta, los manifestantes enfatizaron que, a pesar de haber pasado un año desde la inauguración de Mitikah, continuarán luchando por sus derechos, incluido el acceso al agua potable de calidad.
Resaltaron también la transformación de la calle Real de Mayorazgo para beneficio del centro comercial, lo que ha dificultado el acceso y las actividades culturales tradicionales del pueblo.
Antonio Rosales, miembro del Pueblo de Xoco, exigió a las autoridades atender las violaciones a los derechos humanos derivadas de la construcción de Mitikah, incluyendo el desabasto de agua y el aumento en los costos de servicios.
“Estamos padeciendo el desabasto de agua, cada vez es más difícil transitar por nuestras calles; además, muchos de nuestros vecinos y amigos tuvieron que irse por no poder pagar el incremento a los costos del impuesto predial y los servicios”.
¿Cómo empezó el conflicto?
En 2009, como parte de las medidas de mitigación del desarrollo inmobiliario Mitikah en la Ciudad de México, se estableció que Fibra Uno (FUNO) construyera un pozo para proporcionar agua potable al Pueblo de Xoco.
Esta responsabilidad fue asignada a la Dirección de Verificación Delegacional y Conexiones del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX). Sin embargo, los residentes del Pueblo de Xoco han expresado preocupaciones sobre la falta de transparencia en la operación del pozo y dudas sobre si está cumpliendo con su función de suministrar agua adecuada.
Juan Antonio López, coordinador del área de Justicia Transnacional de ProDESC, ha criticado que el acceso al agua potable en el Pueblo de Xoco se ha convertido en un lujo y ha cuestionado el estudio de factibilidad hidráulica otorgado por SACMEX para Mitikah, argumentando que no se han considerado adecuadamente los impactos en el pueblo. Durante más de diez años, la comunidad de Xoco ha llevado a cabo diversas acciones, incluyendo manifestaciones y estrategias legales, para defender sus derechos. Recientemente, han iniciado una demanda de amparo contra autoridades federales y de la Ciudad de México, con el apoyo de ProDESC.
