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Los mandatarios de Estados Unidos, México y Canadá intentaron restar importancia a sus frustraciones mutuas en materia de migración y comercio.
En el mensaje de cierre de la cumbre de líderes norteamericanos mostraron un frente común por la integración.
AP consigna que las principales tensiones fueron entre Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador cuando este último le echó en cara el “abandono” y “desdén” de Washington hacia América Latina.
“Veinticuatro horas después, la situación dibujada en la conferencia conjunta era más optimista“.
López Obrador agradeció a Biden que no construyera “ni un metro de muro”, una indirecta no tan sutil al predecesor republicano, Donald Trump. Y se unió a una de las prioridades de la administración estadounidense: combatir las muertes por fentanilo, una droga que se produce en México pero todavía no es muy consumida en el país porque para los cárteles es mucho más lucrativo exportarla.
En la declaración conjunta, los tres mandatarios dejaron en claro su intención de trabajar en un solo frente para atender asuntos clave como la migración, la competitividad, la seguridad regional y el cambio climático.
La cordialidad durante su rueda de prensa conjunta contrastó con el intercambio más brusco del día anterior.
Con información de AP
