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Las mejores condiciones climáticas permitieron el lunes que los rescatistas reanudaran los esfuerzos de evacuación y la búsqueda de posibles víctimas después de que el volcán más alto de la isla más densamente poblada de Indonesia entrara en erupción debido a las lluvias monzónicas.
El monte Semeru en el distrito de Lumajang en la provincia de Java Oriental arrojó gruesas columnas de ceniza a más de 1.500 metros.
Las aldeas y los pueblos cercanos quedaron cubiertos por la caída de cenizas, bloqueando el sol, pero no se han reportado víctimas.
Cientos de rescatistas fueron desplegados el lunes en las aldeas más afectadas de Sumberwuluh y Supiturang, donde casas y mezquitas quedaron sepultadas hasta los techos por toneladas de escombros volcánicos.
La última gran erupción del Semeru fue en diciembre de 2021, cuando estalló con una furia que dejó 51 muertos en aldeas que quedaron sepultadas bajo capas de lodo.
Varios cientos sufrieron quemaduras graves y la erupción obligó a evacuar a más de 10.000 personas.
Con información de AP
