Miles de vecinos en los suburbios de Sydney recibieron orden de evacuar el domingo después de que fuertes lluvias provocaran crecidas y desbordamientos.
La Oficina de Meteorología emitió una alerta de mal tiempo por aguaceros e inundaciones, así como vientos de hasta 90 kilómetros.
La represa de Warragamba, al oeste de Sydney, empezó a desbordarse. Las autoridades esperaban que el pico de crecidas fuera comparable a la devastadora inundación de marzo del año pasado.
Los residentes recibieron orden de evacuar, aunque la ministra de Servicios de Emergencias, Steph Cooke, dijo que la gente no necesitaba esperar la orden.
Los servicios de emergencias dijeron haber realizado unos 100 rescates de inundaciones y respondido a 3.000 peticiones de ayuda en las 24 horas previas. Había centros de evacuación en varios puntos del oeste de Sydney, señalaron.
Se recomendó a la gente que evitara viajes no esenciales, incluso en transporte público, ya que algunas carreteras ya estaban sumergidas y otras corrían peligro de inundaciones repentinas.
Con información de AP