Ford suspendió sus operaciones en Rusia, sumándose a la lista de compañías que están respondiendo con un boicot empresarial a la invasión de Ucrania.
La automotriz anunció que donará 100 000 dólares a un fondo de ayuda humanitaria para asistir a las personas desplazadas por el conflicto armado.
El fabricante de automóviles indicó que está preocupado por la invasión de Ucrania y las amenazas a la paz y la estabilidad.
Aunque en los últimos años Ford ha reducido su dimensión en Rusia. En la actualidad la compañía estadounidense producía y vendía en este país furgonetas comerciales a través de la empresa conjunta Sollers Ford.
Ford dijo que, pese a que sus operaciones en Ucrania son muy reducidas, muchos ucranianos trabajan para Ford y la empresa “seguirá apoyándolos durante este periodo”.
Desde que hace cinco días Rusia invadió Ucrania, Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea (UE) han impuesto sucesivas sanciones económicas a Moscú.
Con información de EFE
