Error histórico Cuatrotero: Vicente Guerrero

No cabe duda que la Historia es una de las piedras de tropiezo del régimen de la 4T; algo que se patenta en la ignorancia tanto del presidente como de sus subalternos. Y lo anterior se ha visto en lo que va de los festejos del Bicentenario de la Independencia de México (1821-2021): donde se impuso conmemorar la muerte de Vicente Guerrero, fusilado en 1831.

Según el programa firmado desde la SEP por Lilian Kravozv Appel, Rectora de la Universidad Abierta a Distancia, este “fue víctima de una traición de Agustín de Iturbide”, responsabilizándolo de su ejecución, siendo que el Libertador y Primer Emperador de México fue asesinado en 1824, por lo que nada tuvo que ver con la captura y fusilamiento de Guerrero.

A lo anterior hay que sumarle la desatinada celebración que hizo el presidente para este evento, invitando al nieto de Martin Luther King (?), y con un discurso propio de Luís Echeverría.

Llama la atención el afán del titular del Ejecutivo de conmemorar no solo cosas fuera de lugar sino también de honrar a personajes que han sido nefastos para el país, como es el caso del insurgente nacido en Cuilápam (Oaxaca), quien no solo destacó por ser el primer militar golpista (vencido en una elección por Manuel Gómez Pedraza) o el primer presidente declarado “moral e intelectualmente incapacitado para gobernar” por el Congreso en 1830; también lo es por ser el primer mandatario sometido al gobierno de los Estados Unidos a través del Embajador norteamericano Joel Roberts Poinsett.

En cuanto a esto último sobran los testimonios de dicha influencia en ese primer golpe de Estado a la incipiente democracia mexicana del siglo XIX, como lo es el ofrecimiento de la conducción del país al Embajador, por parte de Guerrero, según carta que se encuentra en sus Archivos (Poinsett Papers /1779-1851) en la Sociedad Histórica de Pensilvania:

“Esto es entre nous: aquí no estaré mucho tiempo más, aunque mis amigos me ruegan que me quede, por estimar mi presencia necesaria. El general Guerrero, quien, si vive, será el próximo Presidente, me ha hecho grandes ofrecimientos, pero yo no renunciaría a mi país para convertirme en Emperador de México”.

Si hay algo más lamentable que la desmemoria histórica de los mexicanos—a lo que le apuesta el Gobierno federal—es la celebración de villanos como “héroes” y de vicios, como virtudes, en este caso.

Twitter: @sada_enrique

 

Las opiniones vertidas en este espacio son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan, necesariamente, el pensamiento de Código Libre.

 

Dejar una comentario

Por favor ingresa tu comentario
Por favor introduce tu nombre aquí
Captcha verification failed!
CAPTCHA user score failed. Please contact us!