Las autoridades francesas decretaron este lunes alerta máxima de coronavirus para la región de París. La medida extraordinaria prohíbe las reuniones por festejos y exige el cierre de todos los bares.
El prefecto de la policía parisina Didier Lallement informó que las nuevas restricciones estarán vigentes al menos por las próximas 2 semanas.
Nos estamos adaptando constantemente a la realidad del virus. Estamos tomando medidas para reducirlo.
A partir del martes, los bares estarán cerrados en París y sus suburbios. Eventos festivos o familiares en establecimientos abiertos al público estarán prohibidos.
Los restaurantes seguirán abiertos bajo estrictas condiciones. Se espera que las normas incluyan un distanciamiento adecuado entre las mesas, una cantidad limitada de clientes y el registro de datos de los comensales.
Las instalaciones deportivas bajo techo solo estarán abiertas para personas menores de 18 años. Los gimnasios se encuentran cerrados.
Salas de cine, teatros y museos continuarán abiertos bajo estrictas reglas sanitarias, ferias y espectáculos profesionales no estarán permitidos.
Se ha mantenido un límite de 1 000 espectadores por día en todos los eventos deportivos grandes, lo que permite que el Abierto de Francia siga conforme a lo planeado.
El director del Servicio de Salud Regional, Aurelien Rousseau, dijo que cerca de 3 500 nuevos contagios son confirmados en promedio diariamente en la región de París.
