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Durante los años 2020 y 2022, la pandemia de COVID-19 impidió la realización de eventos en vivo, afectando a espectadores y artistas por igual.
Sin embargo, en 2023, México ha experimentado un auge en la asistencia a espectáculos en vivo, especialmente en la Ciudad de México (CDMX).
Según organizadores en locaciones como Foro Sol, Parque Bicentenario, Arena Ciudad de México y el Zócalo, la afluencia superó los 4 millones de personas.
Este incremento se debe a la celebración de festivales como Vive Latino, Ceremonia, EDC, entre otros; y a conciertos de artistas como RBD, Taylor Swift y Depeche Mode.
Estas cifras no incluyen eventos en otros recintos de la ciudad ni en la periferia; eso sugiere que el número real de asistentes podría ser aún mayor.
Expertos de la industria musical han calificado este repunte como notable, destacando la recuperación de la industria del entretenimiento en vivo después de un período de conciertos virtuales y “autoconciertos”.
Los precios de las entradas han aumentado, reflejando la inflación y el nivel de los artistas, pero esto no ha disminuido la demanda.
Además, el interés internacional en los festivales y conciertos en México ha crecido, atrayendo a visitantes extranjeros.
A pesar de la recuperación, los expertos señalan áreas de mejora en la infraestructura de los eventos, como servicios, logística y transporte.
