La Basílica de Guadalupe mantiene sus puertas cerradas este 12 de diciembre debido a la pandemia.
El principal líder católico del país latinoamericano dijo que cerrar el recinto por primera vez fue una decisión dolorosa, pero inevitable. Las infecciones por coronavirus se intensifican en la Ciudad de México.
Casi 11 millones de devotos de la Virgen de Guadalupe ingresaron a la basílica, en la capital mexicana, y su plaza adyacente el año pasado en los días previos a su fiesta del 12 de diciembre.
El cardenal Carlos Aguiar dijo a Reuters que los datos de las autoridades de salud mostraban un preocupante repunte de la pandemia. Esto llevó a un consenso entre los líderes civiles y eclesiásticos.
“Hubo, pues una preocupación que compartimos y coincidimos”, reconoció Aguiar, quien fue nombrado arzobispo primado de México por el papa Francisco hace tres años.
Aún así, grupos de peregrinos que llevan cargando imágenes de la Virgen de Guadalupe, muchos de ellos a pie, siguen buscando arribar a la basílica desde rincones lejanos del país.
Sin saber que el recinto está cerrado intentan cumplir sus promesas de rendir homenaje a uno de los símbolos más venerados en el mundo cristiano.
Con información de Reuters
